Mediante una entrevista brindada por el presidente de AFARTE Federico Hellemeyer a FM LA ISLA, se pudo abordar distintas cuestiones que suceden en la provincia en referencia al registro conformado en el marco de Industria de la Nación. El mismo hizo hincapié en la Industria electrónica de la provincia y un curioso pedido que se realizó por parte de actores y fundadores del Tractorazo que se efectuó en la Ciudad de Buenos Aires.

“Cuando decimos el registro, nos referimos a la instancia para unir a la prórroga que se venció el domingo pasado. Fue todo al último momento, porque el decreto lo tenemos de octubre del año pasado, pero la reglamentación recién salió escasa 10 días antes de que venza el plazo para adherir y los trámites se pudieron llevar adelante sin mayor inconveniente. No es que las empresas hayan pedido alguna prórroga, lo que ocurre es que presentado el trámite surgirán algunas necesidades de adecuar algo o presentar alguna documentación adicional, esto está previsto dentro de la misma normativa” dijo Hellemeyer referido al registro en el marco de industria de la Nación.

En relación con el paro que anunciaron desde el sector de la Unión Obrera Metalúrgica Río Grande solicitando un incremento salarial superior a lo acordado a nivel nacional, Hellemeyer dijo, “es cierto que el porcentaje es el mismo un 45% cada siete meses, pero el acuerdo nacional tiene una cadencia de tres tramos abril, julio y octubre, y en cambio la propuesta que se conoció del sector empresario tiene dos tramos uno de 25 y otro de 20. El cual en 4 meses se está registrando un impacto remunerativo sobre el salario del trabajador del 45% y adicionalmente a eso, hay asignaciones no remunerativas sorpresivas de $20.000 cada uno para los meses en los cuales no hay aumento, con lo cual, hay un ciclo de novedades salariales de abril hasta julio, todos los meses, y eso deja parado al trabajador con un salario muy por encima de los valores de la inflación. Este es un muy buen ofrecimiento y la posibilidad de un acuerdo muy beneficioso para los trabajadores”.

Se pudo saber que existe un contacto continuo con la UOM y AFARTE, donde esta semana hubo una audiencia con el Ministerio de Trabajo, y hay pactada otra audiencia para la semana que viene. La seccional de Río Grande tiene un flujo de comunicación constante, donde se busca que todo pueda funcionar, pero a su vez tratando de tener un diálogo con un marco de racionalidad beneficioso para todos.

Frente al plan de lucha ideado por la Unión Obrera Metalúrgica, con un paro por tiempo indeterminado para el miércoles 4 de mayo a partir de las 13hs, comunicó “yo aún no tengo el paro confirmado de forma oficial, no ha llegado aún a la patronal. Tenemos una conciliación obligatoria vigente que venció el 27 de abril pasado y que se extendió por 5 días hábiles”.

“Esperemos que esto sea solo un rumor que dé espacio al diálogo y negociación, venimos de dos eventos de medidas de fuerza por paro de 24hs y otro de 48hs, que fueron negativos para la actividad productiva y la economía de los trabajadores (descuentos salarial y presentismo). La repetición de estas medidas significará más consecuencias para el trabajador y creo que está sobre la mesa, con apertura de diálogo, una propuesta salarial competitiva”.

Además, “la situación inflacionaria actual es complicada y todos sentimos el poder adquisitivo de nuestra fuente de ingreso. En este marco y con las estipuladas cláusulas de revisión en paritarias, nuestra mirada es que hay que ser prudentes, si en este escenario dejamos por fuera las ambiciones y nos concentramos simplemente, en conquistar número grandes por el mero hecho de hacerlo, corremos el riesgo de ir por un camino que no queremos transitar”.

Cabe destacar que, una medida de fuerza de este tamaño, en la empresa afecta de forma negativa también, “en mis 6 años en frente de AFARTE no he vivido un paro por tiempo indeterminado y podría tener consecuencias catastróficas para los salarios, ocasionando sanciones y suspensiones, si entramos en ese camino nada bueno puede salir. Es una paritaria especial porque la economía Argentina viene decayendo en muchos aspectos y hay mucha presión sobre las negociaciones”.