El Banco Central de la República Argentina (BCRA) confirmó que en 2025 adquirirá más de 1000 millones de billetes de alta denominación, con un gasto total de 56 millones de dólares. Esta medida forma parte de los esfuerzos del gobierno de Javier Milei para facilitar las transacciones y afrontar los desafíos de la inflación persistente.

Producción internacional y costos

La fabricación de los billetes será realizada por dos casas de moneda internacionales: China Banknote Printing and Minting Corporation, encargada de los billetes de $10.000 y $20.000, y Crane Currency Malta Limited, que también producirá billetes de $10.000. Estos acuerdos incluyen no solo la impresión, sino también los costos de transporte aéreo y marítimo, dentro del presupuesto de 56 millones de dólares.

De los billetes encargados, 1075 millones serán de $20.000, mientras que 60 millones corresponderán a la denominación de $10.000, con entregas escalonadas a lo largo del año.

Cronograma de distribución

El plan de entrega se dividirá en etapas:

• Enero 2025: 75 millones de billetes de $20.000 y 60 millones de $10.000.
• Marzo-abril 2025: 240 millones de billetes de $20.000.
• Mayo-julio 2025: 300 millones de billetes de $20.000.
• Agosto-septiembre 2025: 220 millones de billetes de $20.000.
• Octubre-diciembre 2025: 240 millones de billetes de $20.000.

Respuesta a la inflación y reducción de costos

El billete de $20.000, introducido en noviembre de 2024, es una respuesta directa a la inflación que impacta la economía argentina. Según el presidente Javier Milei, los billetes de mayor denominación permiten reducir costos logísticos al disminuir la cantidad necesaria para transacciones y transporte. Además, estos billetes están diseñados con medidas de seguridad avanzadas, como marcas de agua y hilos de seguridad.

Comparación con gestiones anteriores

La medida se diferencia de las acciones adoptadas durante el gobierno de Alberto Fernández, cuando el BCRA también recurrió a la impresión internacional, acumulando una deuda de más de 35 millones de dólares con China y Malta. Sin embargo, en aquel momento, la emisión se centró en billetes de menor valor, lo que incrementó los costos logísticos.

Con la estrategia actual, el gobierno de Milei busca optimizar recursos, destacando que la mayor denominación de los nuevos billetes representa un ahorro significativo frente a la creciente demanda de efectivo en el país.