El Gobierno nacional avanza en la revisión de la regulación alimentaria, con el objetivo de fomentar mayor competencia en el mercado interno y combatir la inflación. Dos ejes centrales marcan esta iniciativa: la flexibilización de los requisitos para importar alimentos y una posible reforma de la Ley de Etiquetado Frontal, implementada en 2021.
Uno de los puntos más controversiales de esta ley es el uso de los octógonos negros que advierten sobre excesos en nutrientes críticos como azúcares, sodio, grasas o calorías. Críticos argumentan que la normativa no diferencia adecuadamente los grados de exceso entre productos, generando confusión entre los consumidores. Un regulador ilustró esta problemática: “El yogurt, la mermelada y los caramelos tienen el mismo sello por exceso de azúcares, pero no es lo mismo un exceso del 6% en un yogurt que uno del 70% en caramelos”.
En paralelo, el Gobierno planea agilizar las importaciones eliminando ciertos trámites burocráticos. Entre las medidas propuestas, destaca la posibilidad de evitar la intervención de la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (Anmat) cuando los productos cuenten con certificaciones internacionales, como las otorgadas por la OCDE. Fuentes oficiales señalan: “Si un organismo internacional ya evaluó el producto, no tiene sentido duplicar el proceso aquí. Queremos eliminar esos nichos de burocracia”.
Actualmente, los alimentos importados deben cumplir con regulaciones supervisadas por organismos como el Senasa, lo que genera demoras y, según el Gobierno, abre la puerta a posibles negociados. Con esta simplificación, se busca facilitar el ingreso de productos al país y ampliar la oferta en las góndolas.
Aunque aún no se ha establecido un cronograma definido, las autoridades adelantan que los cambios podrían implementarse en los próximos meses mediante decretos. Estas medidas forman parte de un enfoque más amplio para reducir la intervención estatal en áreas consideradas excesivamente reguladas, con el propósito de dinamizar el mercado interno.
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