Evangelina Portillo, quien se desempeña como empleada en una fábrica textil, en conjunto de compañeros y delegados de la Fabrica BGH, lugar donde trabaja su marido, se encuentran manifestando afuera de la Obra Social y prepaga San-cor Salud, debido a que, desde el mes de agosto no le brindan respuestas para poder iniciar su tratamiento ya que, fue diagnosticada con cáncer de mama.

En primer lugar, Evangelina Portillo manifestó que “hoy me levante decidida a escrachar a esta medicina prepaga porque hacen oídos sordos y no soy la única que está atravesando este tipo de situación ya que, no dan respuestas, no dan negativas y uno tiene que terminar acudiendo a un abogado, ¿con que necesidad? Por eso hoy estoy acá y hasta que no tenga una respuesta no me voy a mover”, aseveró.

Por eso, explicó su situación “desde el mes de agosto que vengo peleando con esta prepaga. Un día asisto a una consulta normal y me diagnostican un cáncer de mama. En un principio, la obra social no me autorizó poder realizarme una biopsia para determinar la gravedad y el tipo de cáncer que tenía”.

En ese marco, señaló que desde la Obra Social “no me dan ningún tipo de explicación, me autorizan solo para que me cubra un 15% del estudio y al consultarles, ¿el por qué? hacen oídos sordos. Tuve que acudir a una abogada con la cual hicimos la presentación, no me dieron respuestas, y posterior a esto, enviamos una carta documento y nuevamente hicieron oídos sordos”, agregando que ante esta falta de respuestas “me vi obligada a presentar un amparo, de hecho, salió positivo para mi parte, pero también no me dieron soluciones”.

Entonces, también detalló que desde la obra social “no me autorizan la medicación, la semana pasada debí hacerme una tomografía y los resultados fueron malos, esto fue debido a no poder hacerme el tratamiento en tiempo y forma ya que, en un principio el médico me dijo que el cáncer era de una proporción chica, pero ahora el diámetro es mucho más grande”.

Por lo cual, dijo muy angustiada que “tuve la muy buena predisposición de esperar desde el mes de agosto, dialogar con las chicas, pero la enfermedad a mí no me espera. Es muy doloroso todo lo que estoy atravesando, me siento doblemente angustiada, una porque me enteré que tengo cáncer y la otra es porque no me contestan, y hoy en día no tengo la medicación para mi tratamiento que es la quimioterapia”.

Remarcando que “mi abogada realizó una presentación por el incumplimiento de la medicación y hoy la jueza dictaminó $40.000 por día por dicho incumplimiento”.

Por último, explicó que “yo contrate esta medicina prepaga debido a que, en la obra social de la UOM, no cuentan con el amplio plantel de profesionales como lo hay en San-cor Salud. Pago una suma bastante elevada para que me den la espalda en una situación así”.