La Cámara de Diputados aprobó hoy el proyecto de ley que implementa la Boleta Única de Papel (BUP) para cargos nacionales, que se comenzará a utilizar en las elecciones intermedias del próximo año. La iniciativa fue impulsada por los bloques de La Libertad Avanza, PRO, UCR, Encuentro Federal, Innovación Federal y la Coalición Cívica, y obtuvo 143 votos a favor, 87 en contra y 5 abstenciones.
Unión por la Patria votó en contra, como había anticipado, mientras que el Frente de Izquierda optó por la abstención.
El proyecto y los cambios
El Senado introdujo modificaciones clave al proyecto, adoptando el modelo mendocino, que no incluye el casillero de voto a lista completa. Aunque la semana pasada sectores opositores intentaron mantener el texto aprobado en Diputados en 2022, que seguía el modelo cordobés con la opción de lista completa, finalmente se respetaron los cambios.
La BUP condensará toda la oferta electoral en una única planilla de papel, con filas para cada cargo electivo y columnas para cada partido o alianza. Los electores deberán marcar una opción por categoría, y si no lo hacen, el voto se contabilizará como en blanco.
Debate en el recinto
Durante el debate, Nicolás Mayoraz, de La Libertad Avanza, celebró el avance del proyecto y criticó a sectores del oficialismo por su preocupación presupuestaria, mientras que Carlos Castagneto, de Unión por la Patria, pidió al presidente Javier Milei que "vete esta ley porque es muy mala para la democracia". Argumentó que el sistema actual ha funcionado sin denuncias de fraude en 40 años.
Por otro lado, legisladoras como Sabrina Ajmechet (PRO) defendieron la Boleta Única de Papel como una herramienta para garantizar que todos los electores puedan votar por su candidato preferido sin problemas de disponibilidad de boletas. Asimismo, destacó que el cambio reducirá el clientelismo y el fraude.
Opiniones divididas
La discusión también incluyó posturas como la de Silvia Lospennato (PRO), quien afirmó que la BUP eliminará prácticas clientelistas, mientras que Eduardo Valdés (Unión por la Patria) criticó el costo del nuevo sistema, calificándolo de "tilinguería" y afirmando que es cinco veces más caro que el actual.
La diputada de la Coalición Cívica, Marcela Campagnoli, sostuvo que la BUP ofrece mayor transparencia, menor impacto ambiental y evitará problemas como el robo de boletas, un fenómeno recurrente en varias elecciones.
Finalmente, la aprobación de la Boleta Única de Papel marca un cambio significativo en el sistema electoral argentino, aunque aún queda por verse si será vetada por el presidente, como demandan algunos sectores del oficialismo.
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