Un hecho de llamativas características se produjo el domingo último, en horas de la mañana, en el departamento Nro. 1 ubicado en la calle Teresa Rodríguez Lavado Nro. 1653, en la capital fueguina, a corta distancia de la Escuela Técnica Nro. 1 “Olga Bronzovich de Arco”.

Lo que en un principio fue un llamado de emergencia por un incendio que se había suscitado en el lugar, luego se convirtió en el hallazgo de un vivero clandestino, con una gran cantidad de macetas con plantas de marihuana que aparecieron en el piso superior del inmueble, en la caja de una camioneta estacionada en las proximidades, en bolsas negras esparcidas en distintos tramos del pasaje peatonal y en un cesto de basura, además de otras tantas más retiradas con rumbo desconocido por quienes serían familiares, amigos y allegados de los moradores del departamento en donde se había producido el siniestro.

Por relatos de vecinos se pudo saber que el ígneo tuvo lugar en horas de la madrugada del domingo en el domicilio de la pareja compuesta por Oriana Jazmín Monzón, de 19 años de edad y Gastón Antonio Tejeda, de 26 años. El fuego se habría originado en una pared próxima a un artefacto de calefacción, logrando ser extinguido por sus propios moradores y por otras personas que acudieron en su ayuda, sin que nadie le diera intervención a los bomberos. La misma fuente informó que Tejeda habría roto un panel vidriado en medio de la situación, causándose una herida que sangraba profusamente mientras en el exterior del inmueble varias personas habían acudido a ayudarlos. “¡Vos quédate acá hasta que vuelva del hospital, no te muevas de acá!” – le habría gritado a viva voz el muchacho a su novia, según relató un vecino, siendo luego trasladado en un vehículo particular a la guardia, evidenciando una abundante hemorragia. “La chica se quedó ahí pero un rato después su mamá se la llevó al hospital para que la examinaran” – agregó la misma fuente.

En el exterior del inmueble, presumiblemente familiares, amigos y allegados de la pareja terminaron de extinguir los últimos vestigios del principio de incendio, retiraron solo las pertenencias de la joven y las trasladaron a un departamento contiguo, el Nro. 2, y lo cerraron con llave. Luego se tomaron la atribución de colocar rápidamente algunas de las plantas de marihuana en bolsas y se las llevaron a bordo de una camioneta de color rojo, con rumbo desconocido. También limpiaron los restos de hojas, tierra y manchas de sangre del suelo, tanto en la parte interior del departamento como en el exterior.

Como si no fuera suficientemente confusa la situación, momentos más tarde la madre de la joven denunció a Gastón Tejeda de victimizarla. La mujer le atribuyó la absoluta responsabilidad de lo ocurrido y lo acusó de sojuzgar a su hija, privándola de su libertad y obligándola a cuidar el cultivo de marihuana, contra su voluntad.

¿Abuso del REPROCANN?

Vale destacarse que los moradores del inmueble contarían con un certificado REPROCANN – Registro del Programa de Cannabis – consistente en una autorización para el cultivo controlado de la especie vegetal, con fines de tratamiento medicinal, terapéutico y/o paliativo del dolor. La medida emanada del Ministerio de Salud Pública de la Nación autoriza la tenencia para los fines nombrados de solo 9 plantas, cantidad absolutamente excedida por las 40 halladas y fotografiadas por el personal policial, además de las que subrepticiamente fueron retiradas por desconocidos.

No dejó tampoco de llamar la atención de los investigadores que en la caja de una camioneta Renault Oroch, dominio AA 545 BX, de color negro, estacionada cerca del departamento, también se encontraron restos de elementos quemados y una bolsa de nylon de color negro, tipo Consorcio, con manchas de sangre en cuyo interior habían ramas cortadas de plantas de marihuana. Bolsas con similar contenido fueron encontradas en un cesto de basura y esparcidas a lo largo de la calle que se ubica muy cerca de los fondos del colegio secundario técnico al que a diario concurren cientos de adolescentes.

La primera autoridad judicial que intervino en el caso fue la titular del Juzgado de Instrucción Nro. 2 del Distrito Judicial Sur, María Cristina Barrionuevo, quien al ser informada del hallazgo de la plantación de marihuana le dio inmediata intervención al personal de la División de Narcocriminalidad y Delitos Federales de Ushuaia, DNy DF. En forma simultánea habría sido anoticiada la Justicia Federal, en la persona del fiscal Juan Soria y de la jueza interina, por ausencia del titular Federico Calvete, Valeria Garín. Esta última – por causas que se ignoran y que sería muy saludable para la institución judicial que se explicaran a la ciudadanía – habría ordenado a los policías de la División Narcocriminalidad que se retiraran del lugar y que no secuestraran los elementos incriminantes descubiertos, en franca oposición al criterio que habría tenido la fiscalía de ese mismo Juzgado.

Al cierre de la presente edición, una consigna de la Comisaría 1era continuaba apostada en el lugar, a la espera de instrucciones.