Luego de un arduo trabajo por parte de la Justicia Penal de la ciudad de Ushuaia, lograron descubrir que una mujer simuló el suicidio de su pareja, en realidad ésta le había quitado la vida intentando así desviar el curso de la investigación. Los investigadores dieron cuenta que los dichos de la mujer no coincidían con las pruebas materiales que fueron encontradas.

Cabe recordar que el hecho tuvo lugar el 4 de julio del años pasado, cuando cerca del mediodía efectivos policiales se hicieron presentes en la vivienda ubicada en Puerto Español 1729 luego de ser alertados por la misma propietaria, identificada como Catalina Raipane Paredes (26), quien informó que al levantarse se dirigió al hall del departamento donde encontró a su pareja José Benito Llancapani (26) el cual se encontraba con una soga al cuello, a lo cual inmediatamente procedió a cortarla con un cuchillo para posteriormente trasladarlo al sector del comedor.

La mujer le explicó a los efectivos que la noche anterior Llancapani le había dicho: “No quiero seguir viviendo… no puedo seguir así”. Según contó la mujer su pareja atravesaba un momento difícil ya que sus padres que viven en Chile en ningún momento le brindaron la contención emocional que necesitaba y que consideraba que estaba distanciado de su familia.

Sin embargo, tras un largo trabajo de investigación, la policía determinó que el hombre no se había quitado la vida sino que había sido Catalina Raipane Paredes quién lo asesinó.

Según los resultados del informe del perito forense determinó que la muerte fue producida por asfixia mecánica por compresión externa por ahorcadura, la que ocasiona una compresión de las estructuras vasculares y obstrucción del pasaje de aire por vía aérea. Todos estos mecanismos solos o en conjunto, provocan una encefalopatía hipoxia-anoxia.

También lograron comprobar que la víctima presentaba un golpe en la cabeza el cual podría haber sido dado por un elemento romo que provocó un efecto anestésico el cual habría sido provocado por la mujer. Debido al desorden de los muebles en la vivienda, presumen que la pareja tuvo una discusión horas previas al hecho.

Tras un análisis sobre el elemento contundente se reveló que tenía restos de ADN de la víctima y de la mujer. Los investigadores sospechan que tras golpear a su pareja Raipane Paredes se aprovechó del estado de semi inconsciencia para ahorcar con una soga al hombre. Incluso se determinaron indicios de autodefensa aunque no evitaron el resultado final.

El fiscal mayor Eduardo Urquiza, se opuso a la excarcelación de la mujer y advirtió “que durante el proceso se ha develado detrás de la muerte violenta de José Llancapani toda una compleja y elaborada puesta en escena material y actoral ejecutada por la imputada que tuvo por objeto simular un suicidio que indica claramente su voluntad de no someterse a la persecución penal e imposibilitar la investigación policial y por ende obstaculizar la administración de justicia”.

La semana pasada la jueza María Cristina Barrionuevo ordenó el procesamiento de Catalina Raipane Paredes por el delito de homicidio agravado por el vínculo y trabó embargo sobre sus bienes hasta cubrir la suma de $1.000.000.