El ministro de Hacienda, Hernán Lacunza, presentó esta tarde en Diputados el proyecto para el Presupuesto 2020. Allí, más allá de las estimaciones para el cierre del año, dejó a la vista algunos recortes que pretende hacer el Gobierno y que deberán ser luego discutidos por el Congreso a la hora de aprobar el presupuesto. El objetivo es mantener la austeridad fiscal para cumplir con las metas del Fondo Monetario.

A simple vista, entre lo que más se recortará están los subsidios a la energía y el transporte. De un año a otro se prevé un aumento de 4,5% y 5,8% respectivamente. Si se tiene en cuenta que la inflación promedio prevista para el siguiente período será del 43,1% el aumento es casi ínfimo.

El otro gran perjuicio lo sufrirán las provincias. Según el escrito que presentó Lacunza, se producirá una merma en las transferencias provinciales destinadas a educación: el aumento será sólo de 5,2%. En cuanto a seguridad social, prevén 0% de incremento

Por último, los gastos destinados a obras serán duramente ajustados: habrá una reducción de 12,8% en la construcción de viviendas y un aumento de apenas 7,2% en educación.