Los desacuerdos entre los dos precandidatos a gobernador, Héctor Tito Stefani (Juntos por el Cambio) y el senador Pablo Blanco (UCR) rompieron una alianza al filo de una fecha clave. La misma a situación que ya se dio en Neuquén y Río Negro y que amenaza con repetirse en Tucumán, Mendoza y Chubut.
Mientras el oficialismo fueguino termina de delinear sus aspiraciones, lo propio hace la oposición en nuestra Provincia, tras el rompimiento anunciado por el diputado nacional de Juntos por el Cambio y referente del PRO, Héctor Tito Stefani.
“Voy a ser candidato a gobernador por el PRO, conformando una alianza con otros partidos provinciales que se llama Creer en Tierra del Fuego” anunció el diputado. La ruptura se dio a partir de la imposibilidad de acordar la candidatura a gobernador entre Stefani y Blanco, y también al rechazo del PRO a definirlo en una interna. Se trata de un entuerto que afectó a Juntos por el Cambio en todas las provincias donde no hay PASO, y que la alianza opositora no pudo resolver a pesar de los pedidos a nivel nacional.
Consultado por las razones por las cuales no se pudo arribar a un acuerdo interno en Juntos por el Cambio, lo que provocó su salida y la de otros referentes, como Federico Sciurano, Tito Stefani, reprochó que, cuando hace un año y medio anunció a los dirigentes electos del espacio su pretensión de ir por la gobernación y armar un proyecto político, “en ese momento nadie se puso en contra, todo el mundo dijo que estaba bien. Y bueno, después aparecieron hace poco tiempo, Pablo (Blanco) con la misma intención, y ahí se empezó a confundir un poco la cancha, empezamos a confundir cosas que para mí tienen que estar claras”, y añadió, “pero pasa en todas las provincias, pasa en todos los espacios”.
El clima en el frente Juntos por el Cambio se agravó con la noticia de que el legislador y referente radical Federico Sciurano abandona el proyecto de coalición Juntos por el Cambio, en medio de las discusiones por el armado del espacio.
Básicamente, el legislador vinculó su drástica determinación a su desacuerdo con “la lógica de la interna nacional”, despiadada en la alianza opositora, por lo tanto, “No puede ser parte de una agenda que Tierra del Fuego necesita, no comparto fundamentalmente el hecho de que la estrategia para construir poder sea destrozar lo que tenés alrededor”.
Planteó que desde su sector “tenemos un proyecto de provincia que lo hemos venido defendiendo a lo largo de los años”, al que considera un aporte en un momento “muy delicado, donde la vulnerabilidad económica que tiene nuestro país en función de lineamientos macroeconómicos es muy delicada”.
Claramente el legislador declaró: “no estoy para sumar a tirar bombas de tiempo para perjudicar a quien le toca gobernar”, toda vez que definió su motivación para actuar en política en “sentirme parte de una generación que puede entender los errores del pasado y marcar un punto de inflexión en esos vínculos”.
Como las alianzas en Tierra del Fuego tienen una lógica propia y muy diferente a las nacionales, la versión por estas horas en la isla es que Sciurano podría sumarse al armado de Melella. Para agitar los rumores, el gobernador salió a defenderlo en público y reconoció su trayectoria.
Melella está a punto de cerrar un acuerdo con La Cámpora para ser el candidato a gobernador del Frente de Todos, pese a que durante su gestión tuvo una relación muy tirante con los tres intendentes.
Pérez confirmó la semana pasada que irá por un nuevo mandato como intendente y confirmó su apoyo a la candidatura de Melella, uno de los pocos gobernadores cercanos a Alberto Fernández.
Nace una nueva alianza: Blanco-Frigeiro, la fórmula
Desde hace meses se conocen las aspiraciones del senador Pablo Blanco de ser Gobernador de Tierra del Fuego; incluso lo adelantó en diálogo con Radio Fueguina, cuando aseguró, respecto a su futuro, “Cuando vos llegás a Papa es muy difícil que quieras volver a ser Obispo y en la política pasa lo mismo: hay jerarquías”.
Por eso, señaló entonces, había dos opciones a futuro: “El próximo paso es ser jubilado o Gobernador y todavía no tengo ganas de jubilarme”. Finalmente, se decantó como era de esperarse por la segunda alternativa.
Y varios nombres circularon a modo de rumor en las últimas semanas para saber quién acompañaría a Blanco en ese proyecto para la Gobernación y todo decantó el actual diputado, Federico Frigerio, que acompaña desde hace varios años a Pablo Blanco y fue uno de los engranajes clave para el proceso de limpieza de Juntos por el Cambio, que incluyó también la traumática salida del legislador Federico Sciurano.
El propio Blanco confirmó a su compañero de fórmula, y dijo de Frigerio: “Es una persona joven, una persona que invierte en Tierra del Fuego y es un dirigente de la Unión Industrial Fueguina, tiene todas las condiciones”.
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