El presidente de la Cámara de Transporte de la provincia, Darío Loreto, hizo un balance del 2023 y aseguró que “la situación del transporte ha sido compleja a nivel país y hemos tenido que atravesar problemas con el tema de la barcaza y el combustible, más algún otro problema, como la importación de cubiertas, de repuestos, los aumentos constantes de la post venta de los camiones, que no se consiguen. Todo hace a que no haya sido fácil y vamos a terminar un año bastante complejo para el transporte. No es bueno todos los meses tener que retocar las tarifas para que por lo menos salgamos hechos”, dijo a Provincia 23.

Consultado acerca de cuántos camiones circulan de la provincia y su procedencia, señaló que “el promedio es de 350 a 380 camiones mensuales. Las empresas de Tierra del Fuego no pueden abastecer a todos y debe haber una relación de 60% de empresas no radicadas en Tierra del Fuego y del 40% de transportes locales. Algunos hacen servicios regulares y otros no”.

Comparativamente, se mantuvo la cantidad de camiones. “Yo creo que estuvo bastante parejo con el año pasado, no hay que olvidar que en Ushuaia teníamos un servicio marítimo desde Buenos Aires y ha caído uno de los dos barcos. Se ha perdido el servicio de buques y eso hizo que gran parte de la carga que se movía por barco se tenga que mover por tierra. Esto compensó la baja de la producción en algunas fábricas y pasó bastante desapercibida. Antes llegaban dos barcos containeros por mes y ahora hay uno solo que hace el tramo Buenos Aires-Ushuaia y hace ese servicio cada 22 días. Han venido otros barcos directos desde Montevideo y desde Brasil, pero se tuvo que sacar toda la carga desde Buenos Aires y eso hizo que el volumen de transporte se haya mantenido en cantidad, a comparación del año pasado. Si los dos barcos hubieran entrado normalmente, indudablemente el volumen de transporte terrestre hubiera sido mucho más bajo”, manifestó.

Recordó que “un camión trae de 25 a 30 toneladas, que es un container, mientras que un barco trae entre 450 y 500 por viaje”. Respecto de las electrónicas, que también están sacando equipos por avión, dijo que “todo lo que es aéreo mayormente son celulares, y ya desde China se maneja así, porque la tecnología va muy avanzada y no da para esperar 60 días hasta que llegue el barco a Tierra del Fuego. En lo que es transporte marítimo debería llegar directamente desde Asia hasta acá y como mucho tardaría 60 días, pero hoy tarda casi 90 días con el costo financiero de esa carga que está flotando, hasta que llega a la línea de la industria. Ni siquiera el camión puede superar eso”, sostuvo.

Aumento de costos

Consultado sobre el aumento de costos de los viajes desde el continente a Tierra del Fuego, dijo que “con el acumulado del año hemos tenido un incremento del 135%, de octubre del 2022 a octubre de 2023. Esa fue la variación anual de los aumentos que hemos tenido. Eso se mide de acuerdo a los aumentos de combustible y ahí no está incluido el costo de la barcaza ni el costo de tener un camión parado cuando no se consiguen repuestos. Esto hace que el costo sea muchísimo más alto”, afirmó.

En materia salarial, dijo que “la diferencia de salarios con el continente es del 40% de acuerdo al convenio colectivo que rige para camioneros. Cuando hay una paritaria eso directamente aumenta todo y la diferencia ya está establecida. Obviamente hay una diferencia con las empresas de transporte del norte que no están radicadas en Tierra del Fuego, pero ellos deberían pagar un adicional por recorrer la Patagonia desde el Río Santa Cruz hasta Tierra del Fuego por lo menos. Deberían pagar con el 40% y no tendría que ser diferente, pero por el momento la situación está así”.

Deuda con TABSA

También se le preguntó sobre la deuda con TABSA y señaló que “no está normalizada la situación de la barcaza, estuve hablando con el gerente de TABSA y me pidió si podíamos intervenir como Cámara y calculo que entre hoy y mañana iban a autorizar algunas transferencias. La deuda se mantiene más o menos en lo mismo y ronda el millón y medio de dólares”, precisó.

Ingreso de alimentos

Por otra parte se lo consultó sobre el ingreso de alimentos y advirtió que “estos últimos dos meses ha bajado un 15% más o menos y esto se nota en los faltantes de algunos artículos. También ha bajado la cantidad de empresas que vienen con mercadería perecedera. Esa parte del transporte ha caído un poco y preocupa por la economía local. En cuanto a lo industrial, todos sabemos que es una época donde tiende a bajar la electrónica, porque ya están stockeados para seguir fabricando hasta marzo o abril, cuando arrancarían de nuevo. No es así con el plástico, que tiene su temporada alta a partir de octubre”.

Puerto de Mirgor

También opinó sobre la construcción de un puerto por parte de Mirgor, que comenzaría en marzo del año próximo. “Yo he sido crítico en algún momento con el tema del puerto y bienvenido sea, porque mientras más puertos tengamos en la provincia va a ser mejor para nosotros. Obviamente celebro que se esté haciendo esto y ojalá que rinda lo que tiene que rendir porque es una necesidad que tiene sobre todo Río Grande, porque el 80% de los contenedores van a la zona norte. Necesitamos el puerto además para bajar el tiempo de tránsito desde origen, por el costo financiero que tiene cuando está la mercadería flotando. Ojalá haya más puertos, uno nuevo en Ushuaia también, pero soy de la idea de hacer algo sostenible que no dependa solamente de la industria, porque la industria tiene vaivenes de acuerdo al color político a nivel nacional. Nosotros debemos pensar en armar algo más grande para que puedan tener un beneficio real las industrias, como un puerto hub, que es un puerto de transferencia. Todas las cargas que vienen desde el Atlántico desembarcan con un tipo de buque, dejan la carga en un muelle de transferencia y lo toman los barcos que vienen del Pacífico, y viceversa. Se van cambiando las cargas y hace que los barcos gasten menos”, explicó.