Los comercios de venta de electrodomésticos y artículos electrónicos sobrevivieron durante estos casi dos meses de aislamiento social gracias a sus canales online.

No obstante, con fábricas cerradas, los stocks comenzaron a quebrarse y en los últimos días comenzó a notarse el faltante de artículos básicos, como celulares de media y baja gama o televisores de 32 pulgadas. Tampoco es fácil conseguir algunos modelos de notebooks, heladeras y lavarropas.

Pero con la reapertura paulatina de las fábricas de Tierra del Fuego, que en las últimas horas comenzó a concretarse en Río Grande y el 13 de mayo se cristalizará en Ushuaia, los minoristas comenzarán a respirar. Sin embargo, habrá que esperar un par de semanas para volver a encontrar en los comercios la variedad de productos que existía hasta antes de la pandemia.

En este contexto, Federico Hellemeyer, Presidente de la Asociación de Fábricas Argentinas de Terminales de Electrónica (Afarte) prefiere se cauto al hablar con BAE Negocios de una vuelta a la normalidad. \"Hay que tener en cuenta que antes del cierre, el 16 de marzo, las fábricas ya estaban operando a un 43% de su capacidad y ahora el ritmo de producción será mucho menor. También hay que ver como reacciona todo lo que tiene que ver con la operación logística. Y además no hay que dejar de tener en cuenta que, por la coyuntura, la demanda también estará contraída\". El sector viene sufriendo dos años seguidos de caídas de ventas.

A criterio del ejecutivo, una de las cuestiones interesantes que tiene el protocolo de seguridad sanitaria es que las empresas sólo podrán activar una línea de ensamblaje por producto y por cada una de las plantas que tengan. Eso provocará que las compañías que fabrican varios tipos de artículos estén obligadas a diversificar y abastecer al mercado con toda su gama de productos. En ese sentido, las únicas que estarán limitadas, serán Carrier, que sólo ensambla aire acondicionados; Philips, que sólo tiene televisores y Brightstar, que se especializa en celulares.

Por el contrario, Newsan, que cuenta con seis fábricas en Tierra del Fuego donde producen diferentes tipos de equipos, podrá sacar mejor provecho de la situación.

La vuelta

En esta primera etapa, reabrieron las plantas de Mirgor, BGH, Iatec, Carrier, Solnik, Famar Fueguina y Radio Victoria, ubicadas en Río Grande, que producen celulares, televisores, microondas y equipos de aire acondicionado para Samsung, LG, BGH, Alcatel, Carrier, Surrey y Hisense, entre otras marcas. La única de las fabricantes tecnológicas de Río Grande que todavía no reabrió fue la que produce para Garbarino (Digital Fueguina).

Con la autorización de los gobiernos nacional y provincial, las empresas arrancaron la producción bajo estrictos protocolos sanitarios, para evitar contagios por la pandemia del coronavirus. Además, para que no hay concentración de gente, las compañías ponen transporte privado y no permiten ir a trabajar a pacientes de riesgo. En las empresas de la isla trabajan unas 8.000 personas en forma directa y 3.500 indirectos.

Con respecto a los trámites para que el Estado se haga cargo de la mitad de los sueldos de los empleados, Hellemeyer indicó que, excepto a una, a todas las empresas que tienen menos de 800 empleados se lo aprobaron. A las que tienen más de esa cantidad de trabajadores aún no. El ejecutivo también indicó que se acordó con los gremios que las personas que no van a trabajar, deben cobrar el 70% de su sueldo bruto.