La inflación galopante de Argentina, en torno al 6% mensual, el freno a las importaciones y la poca oferta de productos, convierten a Chile uno de los destinos de vacaciones más atractivos para algunas compras.
La caída estrepitosa de los salarios argentinos en dólares, por debajo de los 300 dólares mensuales de promedio, han empobrecido a los potenciales veraneantes y dificultado los viajes al exterior. Sin embargo, al pago con dólar tarjeta o dólar blue, todavía hay productos que resultan mucho más económicos que en Argentina.
Esta temporada de verano volvieron las filas de autos en la frontera entre Mendoza y las playas de Viña del Mar, Maitencillo y La Serena, los principales balnearios elegidos por mendocinos, sanjuaninos, sanluiseños y cordobeses para sus vacaciones en el Océano Pacífico.
Las esperas en la Aduana de Los Libertadores (en el ingreso a Chile) alcanzaron las 7 horas promedio desde fin de año y hasta este miércoles. Las quejas de los viajeros y las gestiones de los organismos de Migraciones, Aduana, Sanidad y Turismo de los dos países permitieron que desde este jueves se aumentara el personal en la frontera.
Según informaron funcionarios de la Coordinación fronteriza en la cordillera mendocina, se pasó de cuatro a diez casillas para atención de los viajeros hacia Chile, lo que permitió reducir a cuatro horas promedio la espera en la Aduana de los Libertadores.
El intendente de la ciudad de Mendoza, Ulpiano Suárez, se sumó a las quejas de los viajeros. Demoró 12 horas en recorrer en auto los 360 kilómetros desde Mendoza a Santiago de Chile, porque tuvo 7 horas de espera en la aduana de los Libertadores. Viajó el lunes de esta semana porque tenía una reunión con el gobernador de la Región Metropolitana de Santiago, Claudio Orrego.
El intendente de Mendoza aprovechó este encuentro para conseguir el compromiso del gobernador Obrego de transmitir al presidente Gabriel Boric, la necesidad de acortar las esperas y mejorar los trámites en la frontera con Argentina.
Cambio de neumáticos
En los últimos tres días, cerca de 20 mil personas cruzaron a Chile desde Mendoza. Además de disfrutar de unos días de vacaciones, los turistas aprovechan el viaje para hacer compras de algunos productos.
En el podio de las compras de los argentinos que viajan de vacaciones a las playas chilenas está el cambio de neumáticos. Las mismas marcas de origen chino e, incluso, primeras marcas importadas de Estados Unidos o Europa, se consiguen al 50% del valor que en Argentina.
A pesar de tener en Argentina un tipo de cambio desfavorable, con el agregado de 75% de impuestos al dólar turista, todavía conviene comprar neumáticos, zapatillas, ropa urbana y deportiva, bazar, artículos de camping y algunos productos de electrónica.
"Antes de salir me contacté por mail con un negocio de neumáticos de Viña del Mar, me pasaron los precios y hasta me enviaron una nota de venta fijando el precio final de la compra", cuenta Luis, un mendocino que viajó en la previa de Navidad a Chile.
Y precisó: "Cada neumático chileno me costó -al cambio de dólar blue- 32.000 pesos argentinos. Las mismas cubiertas en Mendoza, me costaban 78.000 pesos. Por lo que me ahorré el 50% del valor. Son cubiertas marca Kumho, de origen chinas".
Andrea, médica mendocina, viajó la semana pasada con su pareja a Santiago de Chile y cambió dos neumáticos de su camioneta Chevrolet Tracker. Pagó el equivalente de 60 mil pesos argentinos cada una, marca Michelin rodado 16. En Mendoza, por cada neumático le pedían 120 mil pesos. "Aprovechamos que íbamos a comprar los regalos de Reyes y de paso, cambiamos las ruedas", contó.
Las leyes aduaneras en Argentina prohíben la compra de neumáticos dentro de la franquicia mensual por adulto de 300 dólares por vía terrestre y 500 dólares por via aérea que tienen los turistas que viajan al exterior. Por eso, los viajeros que cambian los neumáticos los usan y pisan algunos días previos al retorno para no llegar con las ruedas nuevas a la frontera y correr el resigo de tener que pagar el impuesto aduanero.
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