En una tarde marcada por el color, la diversidad y la lucha, Río Grande fue escenario de una nueva Marcha del Orgullo LGBTIQ+. Bajo el lema “No hay libertad sin derechos ni políticas públicas”, cientos de personas de distintas edades y sectores sociales recorrieron las calles en un acto que combinó celebración, denuncia y resistencia frente a las desigualdades que enfrenta la comunidad.

Denuncia y resistencia frente a los retrocesos

La marcha, que siguió a una concurrida movilización en Ushuaia, no solo celebró los logros históricos de la comunidad, como el matrimonio igualitario, sino que también denunció los retrocesos en derechos, el ajuste económico y los discursos de odio que persisten en el país. Para Bruno Bustamante, representante de Ascensión Orgullo, la manifestación es una forma de resistir ante la falta de medidas inclusivas y el difícil contexto social.

Exclusión laboral y barreras sociales

Bustamante señaló que las personas trans siguen siendo una de las poblaciones más vulnerables, enfrentando desafíos significativos en el acceso al empleo, la salud y la educación. Aunque existen políticas como el cupo laboral travesti trans, su implementación sigue siendo deficiente. “Esta marcha no es solo para celebrar, sino para reclamar leyes integrales que nos protejan a todos”, afirmó.

Un llamado a la acción legislativa

Durante el evento, la comunidad hizo un fuerte llamado a las autoridades provinciales y nacionales para impulsar normativas inclusivas y proteger los derechos adquiridos. Según Bustamante, es fundamental contar con una legislatura comprometida con los sectores más desfavorecidos. “Necesitamos leyes como la integral trans y la antidiscriminatoria. Esta lucha es de todos, no solo de la comunidad LGBTIQ+”, subrayó.

Un mensaje de unidad y esperanza

Más allá de los reclamos, la Marcha del Orgullo en Río Grande demostró la solidaridad y el apoyo de la sociedad argentina hacia la inclusión y el respeto. Para Bustamante, este tipo de movilizaciones refuerzan el compromiso colectivo con una sociedad más igualitaria. “Nuestra lucha busca una ampliación de derechos que beneficie a toda la población. El amor y la igualdad son los pilares de un futuro mejor”, concluyó.

Con banderas, música y mensajes de reivindicación, la marcha dejó una huella en la ciudad, recordando que la lucha por los derechos humanos es un compromiso permanente.