Raúl Bombares, secretario general del SUTCAPRA, se manifestó alarmado tras los recientes episodios violentos ocurridos a la salida del local nocturno "Level". Según detalló, los incidentes no son aislados y reflejan un problema recurrente en los boliches de Río Grande. "A principios de la semana pasada ya hubo conflictos donde los enfrentamientos involucraron tanto a controladores como a clientes y vecinos", señaló.

Bombares subrayó que la normativa vigente, como la Ordenanza Municipal 2665 y la Ley 26370, limita la intervención de los controladores a los espacios internos de los boliches. "Nos vemos con las manos atadas porque fuera de los locales, en las veredas, la violencia entre los jóvenes es evidente, pero no tenemos facultades para actuar", lamentó.

Además, destacó la ausencia de la policía en estos lugares durante los fines de semana. "En redes sociales circula un video donde los jóvenes protagonizan una pelea masiva sin que la policía interviniera. Esto es una responsabilidad tanto de la policía provincial como de los boliches, que podrían requerir servicios adicionales de seguridad", afirmó. En este contexto, instó al municipio a tomar cartas en el asunto: "Pedimos que gestionen la presencia policial en los boliches. No pueden mirar para otro lado cuando está en riesgo la seguridad de nuestros jóvenes".

Bombares hizo un llamado urgente a las autoridades locales para que asuman un rol activo en esta problemática. "El municipio inspecciona rigurosamente a los comerciantes, y eso está bien, pero también debe involucrarse en garantizar la seguridad en los espacios bailables. Hoy estamos ante una situación de abandono tanto por parte de la policía como del municipio", concluyó, advirtiendo sobre el peligro latente de que ocurra una tragedia si no se actúa a tiempo.