Jonatan Rueda, fundador y director de la agrupación de danza Raíces Andinas, es un referente cultural en Río Grande y en toda Tierra del Fuego. A través de su pasión por la danza del caporal, ha logrado trascender las fronteras de la provincia y dejar una huella en el escenario nacional e internacional. Su agrupación recientemente alcanzó el primer puesto en el concurso internacional Apasionarte, realizado en Santa Helena, Entre Ríos, un logro que llena de orgullo a la comunidad fueguina.

"Muchísimas gracias, nosotros viajamos el día jueves de la semana pasada hacia Santa Elena, Entre Ríos, donde se realizó la competencia internacional de danza Apasionarte el sábado y el domingo. Gracias a Dios, a los padres y a los chicos que pudieron viajar, logramos obtener el triunfo y traer la copa a Río Grande", expresó Jonatan, visiblemente emocionado por el logro de su agrupación.

Este campeonato representa un hito importante en la carrera de Raíces Andinas, ya que fue la primera vez que la agrupación participó en una competencia fuera de la provincia. Jonatan relató el sacrificio que implicó este desafío: "Ha costado muchísimo, porque hemos tenido que vender rifas, los padres han tenido que sacar de donde no había para poder costear el viaje. Ha sido un gran esfuerzo de todo el grupo completo. Parte del escollo que llevamos fue seleccionado con chicos de distintas edades, lo que ha sido un desafío adicional".

El triunfo no solo tiene un significado personal para Jonatan, sino que también marca el reconocimiento a la danza del caporal en una provincia donde este estilo no era tan conocido. "Representa muchísimo dejar en lo más alto a Tierra del Fuego, a Río Grande. Y más que nada, dejar asentada la danza que nosotros hacemos. Aquí en Río Grande ha costado muchísimo sembrarla y dejarla bien plasmada", comentó Rueda.

Jonatan también recordó los inicios difíciles de la danza del caporal en la región. "Cuando llegué a Río Grande, esta danza era algo muy escondido, muy básico. Golpeé muchas puertas y me las cerraron. Incluso ensayábamos en las plazas y en los barrios. Hoy, gracias al apoyo de la gente, hemos podido abrir espacios. Trabajamos con chicos de distintos barrios como Chacra 13, Chacra 2, Chacra 4, y el Centro", recordó con nostalgia.

La delegación de Raíces Andinas viajó con 15 integrantes, entre ellos padres y bailarines, y llevaron cinco coreografías a la competencia. De las cinco, cuatro obtuvieron puntajes perfectos (10), y una logró un 9.85. "En promedio sacamos 9.97, quedando en primer lugar, mientras que el segundo puesto tuvo 8.86", explicó Jonatan con orgullo. Este éxito ha sido un reflejo del arduo trabajo realizado por todos los integrantes del grupo, desde los más pequeños hasta los adultos.

"Este tipo de competencias son una oportunidad para dejar en alto nuestra cultura, y estamos muy contentos de haberlo logrado. Además, allá en Entre Ríos hubo mucha repercusión porque era la primera vez que se presentaba un grupo de este estilo, y fue muy bien recibido", contó Jonatan, resaltando la importancia de dar visibilidad a la danza del caporal fuera de Tierra del Fuego.

El éxito de Raíces Andinas no se limita solo a este concurso. Jonatan dirige una agrupación con alrededor de 65 a 70 bailarines, que practican durante todo el año, desde los carnavales hasta el cierre de fin de año. "No paramos durante todo el año. Comenzamos con los carnavales y culminamos con el cierre de fin de año. No solo ha crecido mi grupo, sino que hay otros grupos en Río Grande que también están avanzando, y eso es positivo porque estamos marcando la danza del caporal en la ciudad y en la provincia", destacó Rueda.

Este trabajo constante y el apoyo de la comunidad han sido fundamentales para el crecimiento de la danza del caporal en la región. "Me enorgullece mucho ver cómo la gente de Río Grande ha tomado esta danza como propia. Hemos logrado lo que muchos pensaron que no era posible, y hoy nos sentimos muy felices de poder dejar esta tradición en lo más alto", concluyó Jonatan Rueda, quien sigue liderando con pasión y esfuerzo a Raíces Andinas en su misión de llevar la danza del caporal más allá de las fronteras de Tierra del Fuego.