**Comercio en Tierra del Fuego: Impacto de la Inflación y Expectativas para el Segundo Semestre**
En una reciente entrevista, el presidente de la Cámara de Comercio de Río Grande, José Luis Iglesias, abordó la situación actual del consumo en la provincia y las expectativas para el segundo semestre del año. La entrevista reveló una caída constante en el consumo y las dificultades que enfrentan los comerciantes para mantener sus negocios en funcionamiento.
En comunicación con Radio Provincia, Iglesias explicó que el consumo ha seguido disminuyendo en junio con respecto a mayo, con una caída del 9,6% en promedio. "Hemos notado una caída en la facturación de casi un 40% en unidades comparado con el año pasado, y aunque el valor nominal de las ventas haya aumentado, la inflación del 280% ha afectado significativamente el poder adquisitivo", comentó. Esta disminución se refleja en la necesidad de los comerciantes de ofrecer descuentos y promociones para liberar stock y generar caja, lo que les permite seguir pagando alquileres, sueldos e impuestos.
La situación se complica por el alto costo de reposición de productos, que a menudo es igual o superior al precio de venta actual, dificultando así la gestión financiera de los negocios. "Es difícil explicar a los consumidores que los precios pueden variar considerablemente debido a la inflación y otros factores externos, como la logística y la competencia con precios de otras regiones", explicó Iglesias.
La Cámara de Comercio también ha estado trabajando en conjunto con las autoridades para obtener medidas de alivio para los comerciantes. "Desde febrero, anticipamos la situación y solicitamos la emergencia comercial. Estamos promoviendo una moratoria similar a la nacional para el nivel provincial, con cuotas a 84 meses y tasas de interés reducidas", indicó Iglesias. Este plan incluye la atenuación de juicios y reclamos judiciales, ofreciendo una oportunidad a los comerciantes de regularizar su situación financiera.
La entrevista también abordó el fenómeno de la reducción de precios en ciertos productos, un tema complejo que, según Iglesias, se debe a varios factores, incluyendo la necesidad de liquidar inventarios y ajustar los precios inflados anteriormente debido a la alta inflación. "Es una realidad que los comerciantes deben manejar. Los precios pueden bajar debido a la necesidad de liberar stocks y generar liquidez, pero también influyen otros factores, como la logística y la competencia", añadió.
A pesar de los desafíos, Iglesias señaló algunas señales positivas para el futuro. La normalización de relaciones entre el gobierno provincial y el nacional, así como la continuación de obras públicas, son vistos como factores que pueden impulsar la economía local. "La construcción y sus sectores colaterales son fundamentales. La reactivación de obras y la firma de acuerdos para finalizar proyectos en curso son gestos positivos que pueden tener un impacto significativo en nuestra economía", concluyó.
La Cámara de Comercio de Río Grande sigue trabajando para apoyar a los comerciantes locales, promoviendo el diálogo y la colaboración entre las instituciones y buscando soluciones viables para superar los desafíos económicos actuales.
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