El gremio de empleados de comercio acordó este viernes un bono de compra de $5.000 para el personal encuadrado en su convenio en Carrefour. Además de dicha suma para adquirir productos de la empresa, los trabajadores de la cadena recibirán un kit de higiene personal y beneficios para darse la vacuna antigripal.
\"Se trata de una retribución por el gran esfuerzo llevado a cabo por todos los empleados de comercio en estos tiempos de emergencia social y sanitaria\", afirmó en un comunicado el titular del sindicato de comercio, Armando Cavalieri.
El crédito por $5.000 podrá ser utilizado en mayo y alcanzará a todos los empleados mercantiles de la compañía francesa, incluidos aquellos que realizan jornada reducida o están sin tareas por la cuarentena.
\"Luego de importantes gestiones conjuntas y grandes esfuerzos mancomunados, se tomó en consideración el pedido de la entidad sindical para que dicho monto se destine a todos los trabajadores, independientemente de la jornada laboral que cumplan o la situación laboral en la que se encuentren. Es decir, también será para aquellos que no realicen tareas actualmente, con motivo del Aislamiento Social Preventivo y Obligatorio decretado por el Ejecutivo nacional\", sostuvo el sindicalista.
Carrefour, Coto, Jumbo y Walmart ya habían otorgado este mes un \"aporte solidario\" de $5.000 para los empleados que cumplen tareas durante la emergencia sanitaria. Desde el inicio del aislamiento obligatorio, los supermercados fueron incluidos dentro de las actividades esenciales.
\"Estas circunstancias ponen en relieve la importancia de las estructuras de los sindicatos. Una vez más el movimiento obrero demuestra estar a la altura de las circunstancias, al brindar protección a sus más de 14 millones de afiliados que están adheridos a sus distintas obras sociales\", dijo Cavalieri.
Los sindicatos enfrentan por estas horas un fuerte deterioro del escenario laboral por el parate de la economía. En el marco de la cuarentena, las paritarias quedaron virtualmente congeladas y el sector privado avanzó en suspensiones masivas con rebajas salariales, mientras que la fijación de precios máximos no detuvo los aumentos en las góndolas.
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