“Tomamos conocimiento hoy de cuatro despedidos en el supermercado La Anónima, con la posibilidad de que el número crezca todavía más. No lo tenemos claro, hemos hablado con la empresa y dicen que obedece a una reestructuración con revisión de legajo y, dentro de este margen que tienen con pérdidas establecidas en las sucursales, vienen insistiendo desde hace rato con despedir gente”, señaló el dirigente mercantil.
Sobre la situación expresó que “nosotros la venimos sosteniendo, pero ahora sin aviso, sin ninguna comunicación previa, hubo cuatro despedidos. Dicen que se van a pagar las indemnizaciones al 100%, pero son cuatro compañeros más desempleados. Recién terminamos una reunión con el cuerpo de delegados para hacer las asambleas en las sucursales, establecer qué medidas quieren tomar los compañeros en el caso de que deseen avanzar”, expresó.
Entendiendo que “para la ley se abonan las indemnizaciones, se pagan en forma completa y nos dejan, en ese sentido, atados de manos”, advirtió el dirigente mercantil. Aunque agregó que “obviamente, si hay alguna posibilidad de alguna medida que nos permita el reingreso, lo haremos. Si no es así es un hecho consumado”, lamentó Rivarola.
Por otra parte comentó que “todas las sucursales de la carnicería JR cierran definitivamente y dejan a 10 compañeros en la calle. Los telegramas de despido hablan de causas de fuerza mayor, de problemas económicos, y pretenden pagar las indemnizaciones con el artículo 247 que es al 50%. En este caso lo que hicimos es reunir a los compañeros para rechazar la causal del despido, en tanto esperamos sean las liquidaciones finales conforme al artículo 245, o sea al 100%”, reclamó.
El secretario Adjunto del CEC mencionó luego que “arrancamos un lunes muy complicado, con mucha gente perdiendo su empleo. Nos preocupa porque esto sigue creciendo y vamos a ver que nos deparan los próximos días”, alerto. Rivarola aclaró que para poder habilitar el artículo 247 la empresa JR está obligada a haber presentado “un preventivo de crisis o estar en medio de un concurso de acreedores, que le solicitan la quiebra. Eso habilita la posibilidad de una reducción en las liquidaciones finales, sin ninguna de esas dos herramientas legales pueden decir todo lo que quieran pero para la ley corresponde que se paguen las indemnizaciones al 100%”, insistió.
Al ser consultado sobre la situación en el supermercado La Anónima, no descartó que continúen los despidos y señaló que tienen entendido “que también hubo despidos en Ushuaia, aunque no tenemos el número preciso. Pero esta es una situación que se viene dando desde hace un tiempo, cada tanto sacan a dos o tres empleados porque la idea de la empresa es que sobra gente para la cantidad de ventas que tiene y por las pérdidas que están teniendo en Tierra del Fuego”. “Así que obviamente la variable de ajuste siempre es el trabajador, entonces vamos a ver qué opinan los trabajadores y en virtud de lo que se resuelva seguiremos avanzando”, adelantó.
El dirigente mercantil confirmó que, lejos de intentar incrementar las ventas bajando los precios, el supermercado continúa con los mismos niveles y reduce gastos achicando el personal. Mencionó que “están las ofertas que habitualmente están para atraer a los clientes, pero no sabemos si eso obedece a captar más clientes de los habituales o tenemos una economía estable en Río Grande, que hace que no se pueda vender más porque los trabajadores no tienen plata en el bolsillo”, advirtió.
Después, al mencionarle que por otro lado abren supermercados mayoristas por ejemplo en Ushuaia, dijo que el tema de la cadena de comercialización en el CEC no lo tienen “muy claro, sobre todo en un supermercado como La Anónima que es productor hasta de su propia carne. Tienen muchos productos que son marca propia, pero es cierto que hay mayoristas que venden a valores menores; entonces algo debe estar fallando obviamente”, sentenció.
Finalmente indicó que “hay que ver cuál es la situación, porque estos supermercados mayoristas que se abren no trabajan con el mismo caudal de personal que tiene un supermercado por sector. Entonces ahí puede haber alguna diferencia, pero la realidad es esa. Encima la apertura de locales con competencia directa, como tenemos un mercado cautivo en Tierra del Fuego, sobre todo en Río Grande, la apertura nueva de un local le quita venta a otros”.
“Obviamente, lo que se crece en ventas en un lado falta en el otro, nosotros dependemos de un crecimiento de la economía y de salarios que no sean del sector”, remarcó Daniel Rivarola. En el mismo sentido dijo que “lo que hace falta es un cambio de fondo, independientemente de la situación de que los patrones -ante la falta de venta- pretendan trasladar al obrero las consecuencias”.
“Hay una realidad, que es que se impone un cambio de fondo en la economía nacional, una reactivación de la industria. Porque si no generamos salarios nuevos, si no ponemos plata en el bolsillo de los trabajadores, no hay manera de reactivar el comercio. Entonces la reactivación pasa por abrir más empresas, por activar el mercado, esa es la única alternativa”, concluyó el secretario Adjunto del CEC.
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