La actividad aérea y ferroviaria se verá severamente afectada el próximo miércoles 10 de abril, tras la confirmación de varios sindicatos de que se sumarán al paro nacional convocado por la Confederación General del Trabajo (CGT). La medida alcanzará a aeropuertos, trenes y subtes de todo el país.

Entre los gremios que participarán de la huelga se encuentran la Asociación Técnicos y Empleados de Protección y Seguridad a la Aeronavegación (ATEPSA), que agrupa a los controladores aéreos; la Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas (APLA); la Asociación del Personal Aeronáutico (APA); y la Unión del Personal Superior y Profesional de Empresas Aerocomerciales (UPSA). En conjunto, estas organizaciones garantizan gran parte de la operativa del sistema aeronáutico, por lo que se esperan cancelaciones y reprogramaciones de vuelos a nivel nacional.

ATEPSA, a través de un comunicado oficial, expresó su adhesión “activa” al paro y a las movilizaciones previstas para la misma semana. Además, el gremio declaró el estado de alerta y movilización y anunció que realizará una asamblea el 4 de abril para reforzar su estrategia de reclamos vinculados a los salarios, las condiciones laborales y la defensa de los puestos de trabajo.

El paro no solo impactará en los aeropuertos, sino que también afectará al sistema ferroviario. La Fraternidad y la Unión Ferroviaria confirmaron su participación, lo que implicará la suspensión total de los trenes durante la jornada. Asimismo, los metrodelegados del subte porteño anticiparon que reducirán la frecuencia del servicio, complicando la movilidad en la Ciudad de Buenos Aires.

Esta será la tercera medida de fuerza de alcance nacional impulsada por la CGT desde el inicio del gobierno de Javier Milei. A la huelga general se sumará una movilización prevista para el 9 de abril, en rechazo a las políticas económicas del Ejecutivo.