
Tras el lamentable episodio ocurrido en la Unidad de Detención Uno, donde anoche un efectivo del Servicio Penitenciario se quitó la vida, la licenciada Itatí Aldavez abordó la problemática que afecta a la salud mental de quienes trabajan en ese ámbito. La especialista expresó su pesar por lo sucedido y envió sus condolencias a los familiares y compañeros.
Aldavez, quien anteriormente encabezaba un área psicoasistencial específica para la contención del personal penitenciario, advirtió sobre la importancia de restablecer un organismo de atención psicológica, argumentando que no alcanza únicamente con dictar capacitaciones o cursos de prevención del suicidio.
En este sentido, remarcó que existen múltiples factores detrás del deterioro emocional del personal penitenciario, tales como las condiciones laborales adversas, la falta de descanso apropiado, salarios insuficientes y la escasez generalizada de insumos básicos. “El personal enfrenta largas jornadas sin condiciones mínimas de comodidad, muchas veces sin papel higiénico ni uniformes adecuados, y hasta sin herramientas de trabajo apropiadas”, enfatizó.
La profesional detalló, además, situaciones concretas como la de la Torre 3, lugar donde ocurrió el suicidio reciente, destacando que dicho puesto carece de calefacción, baño y condiciones básicas que dignifiquen el trabajo de los efectivos, algo que calificó directamente como "un maltrato".
Por otra parte, Aldavez señaló que la problemática también incluye aspectos sociales y familiares, puesto que las exigencias laborales reducen significativamente el tiempo de descanso y vida familiar, afectando de manera negativa el equilibrio emocional de los efectivos.
Criticó asimismo que se haya desactivado el Departamento Psicológico que ella dirigía, mencionando que luego de su traslado para asistir a los internos, el área dejó de existir completamente, lo que agravó aún más la situación.
Finalmente, Itatí Aldavez destacó que para enfrentar adecuadamente esta problemática debe existir un enfoque integral que considere no solo atención psicológica básica, sino también la mejora estructural del ámbito laboral, condiciones salariales dignas, espacios recreativos adecuados y un reconocimiento genuino a la importancia del bienestar emocional de quienes prestan servicio en las instituciones penitenciarias.
Ante emergencias o consultas, está disponible la línea telefónica gratuita para apoyo en salud mental: 0800-999-0091.
Compartinos tu opinión