Mariana se aflige y se queja, con razón, y asegura que la semana pasada estaba “sacadísima”, sin embargo, toma aire y explica: “Estoy tratando de tener paciencia, pero ya es mucho ultraje respecto a la identidad de una persona mucha más de una menor de edad que fue ultrajada y violentada en su infancia por su propio padre biológico”, comenta.
“Mi hija pide sacarse el apellido de este monstruo desde hace 5 años. Ya tuvimos juicio, condena, pero no logramos terminar con la revictimización, sobre todo por falencias judiciales, no puedo referirme a otra manera”, enfatiza.
Cuando comenzó con el trámite de supresión de apellido, debió interiorizarse sobre el tema, sin embargo, “no había letrado, no estaba preparadas las leyes y ahora estoy esperando la respuesta del Gobernador Melella”, que fue una de las últimas personas con las que las integrantes de la Agrupación Madres en Lucha, lograron reunirse, y aun así, los tiempos no son los de las familias.
Mariana vuelve a decir, “no es solo judicial, hoy estamos tocando desde todos los puntos que se pueda dar empatía, estamos hablando de los menores de edad que están reclamando por su identidad, que al fin y al cabo, es vida” y agrega, “es entender que hay un menor que tiene miedo, por ejemplo si le pasa algo a la madre, ¿con quién se queda?” se pregunta, y responde, “con la persona que figura en el acta de nacimiento y le seguimos fomentando el ultraje y la revictimización”.
Los tiempos de las instituciones, no son los de las familias
“No puedo entender que pasan meses, primero del juzgado, después del Registro Civil, ahora entiendo que el registro debe dar la una respuesta para ver qué juez se digna a darme respuesta para que le quiten el escrache del acta de nacimiento y el ultraje del DNI, así pasan el tiempo, semanas, meses, años”, vuelve a repetir.
Para que no queden dudas acerca de los años que lleva luchando para lograr que su hija ya no tenga nada que ver con el hombre que le robo la infancia, Mariana aclara, “La causa es 650¬ del 2015, lleva seis años de condena y sale a trabajar, o sea, el violador se está reinsertando y no mi hija”.
“Las leyes están a favor de los violadores, no se entiende, no he tenido llamados, ni gestos de agilizar esto que hace años vengo planteando”, volvió a reiterar.
“La supresión del apellido esta logrado, la responsabilidad parental suprimida esta lograda, a lo que me refiero hoy por hoy es la falta de humanismo que se tiene al hecho de ver que mi hija no quiere tener nada que ver con Patricio Manuel Chaldaris, o sea, ella tiene 10 años, cuando paso, tenía 3 años y medio y hoy sigue siendo consciente que no quiere tener nada que ver con él”.
“Ahora en el acta de nacimiento le adjuntan toda la causa y el nombre de quien le arruino la vida a mi hija”, y es justamente eso lo que están tratando de eliminar.
Junto a su abogada, la Doctora Verónica Argüello, “llevamos más o menos 1 mes, del Registro Civil a mí me tiene n que decir porque no le sacan del acta de nacimiento el nombre de su padre biológico”.
El trámite siguiente, es que “el Registro Civil tiene a una abogada que maneja esta cuestión, lo que tengo que hacer es que el juez tenga ganas de solidarizarse y empatizar contra este ultraje que llevamos con mi hija hace más de 6 años”.
“La lucha es desde que inició el juicio, pero pedimos restricción parental hace más de 3 años, cambie de abogados, pasan cosas y los tiempos se dilatan. Seguimos en la misma y en la nada”, reitera Mariana, esperando ser escuchada.
“Hay muchas leyes que acá en Tierra del Fuego no se cumplen, entonces, basta de corrupción, basta de no buscar el derecho del niño, estamos para atrás socialmente, ¿no es parte de la sociedad, un fiscal, un juez un policía que dan privilegios a un hombre que le arruinó la vida a una niña?”, se pregunta.
“Tengo enojo, pero quiero que esta impotencia se vaya, estoy esperando respuesta de mi abogada sobre el Registro Civil, sino iré a pedir justicia”, dijo para concluir.
La causa sobre la supresión de apellido y supresión de responsabilidad parental se encuentra a cargo del juzgado de Familia de la Doctora Marisa Montero.
Compartinos tu opinión