En la primera jornada del juicio oral contra Yonatan José Parra, el mismo refirió que fue Walter Marcelo Liendro quien lo atacó y que usó el arma para defenderse, pero luego Liendro en su testimonial se mostró muy seguro de sus dichos.
Corto y conciso, Liendro refirió que hacía pocos días había llegado a la provincia, oriundo de Salta, junto con su pareja y su hijo menor de edad, buscando un mejor pasar económico, e intentando dejar atrás el mundo de las adicciones. Fue de esta manera, como Liendro y su familia llegaron a la margen sur.
Señaló que siempre Parra se mostraba desafiante con la mirada y que esa tarde del 25 de agosto del año pasado, salió a comprar y mantuvo un entredicho con Parra, quien lo recriminó por mirarlo.
Liendro destacó que lo invitó a un “mano a mano” pero Parra fue a su casa y que luego más tarde al volver a pasar, se volvió a producir este cruce de miradas y palabras tras lo cual Parra sacó un revólver de entre sus ropas y le gatilló “tres veces”, aseveró, reconociendo incluso el arma incautada en el marco de la causa.
La víctima refirió que de milagro no salieron los disparos y que tras ello Parra lo atacó a culatazos, sufriendo cinco cortes en la cabeza.
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