El Banco Central de la República Argentina implementará desde septiembre una serie de incrementos ten las tasas de interés aplicadas al uso de tarjetas de crédito y a los préstamos personales.

Se prevé que en las tarjetas de crédito la la tasa diferencial se eleve a un 107%, lo que representa un aumento de 19 puntos porcentuales con respecto a la tasa actual.

Esta modificación se alinea con el aumento en el rendimiento de los plazos fijos a 30 días por un monto de hasta $30 millones, que ha pasado de un 97% a un 118%.

Según lo comunicado en el documento oficial del Banco Central, se ha emitido la directriz de sustituir, a partir del ciclo de facturación correspondiente a septiembre de 2023, el límite anual de interés compensatorio para financiamientos a individuos asociados con tarjetas de crédito, estableciendo una tasa del 107% que será aplicada por las instituciones financieras.

Estas medidas surgen después de las PASO del domingo donde Javier Milei se impuso con gran cantidad de votos como candidato a presidente, y luego de que el Banco Central también disponga un aumento en el valor del dólar oficial, fijando un precio de $350 más impuestos, como mínimo, hasta el 22 de octubre.

Con estas modificaciones, las tasas de interés para los depósitos a plazo fijo convencionales y las Leliq con un plazo de 28 días alcanzan el 118%. Como resultado, la Tasa Efectiva Mensual (TEM) se sitúa en un 9,73%, mientras que la Tasa Efectiva Anual (TEA) llega al 209,4%. En el caso de otros plazos fijos, se estipula un rendimiento mensual del 9,12%, correspondiendo a una tasa anual del 111%, lo que representa un incremento del 21% con respecto al periodo anterior, llegando así a una TEA de 189,3%.

En lo que concierne a las tarjetas de crédito, la tasa de interés anual se eleva al 107%, reflejando un aumento del 21%. El costo efectivo mensual se estima en un 8,79%, mientras que la TEA se ubica en un 178,9%, según publica Ámbito.