Belén Ibarra es la hermana de la joven que fue agredida en el boliche Maldito Ibiza y dialogó con Minuto Fueguino donde brindó detalles de lo sucedido en la madrugada de este lunes. Cuestionó el accionar policial como así también el del personal del local nocturno donde todos los días se registran hechos gravísimos de violencia.
Asimismo, criticaron el trato de la primera médica que asistió a Micaela Ibarra cuando llegó herida al Hospital de Río Grande.
Al respecto, relató que “el 25 en horas de las siete de la mañana, dentro de las instalaciones de Maldito Ibiza, ella estaba adentro del boliche, luego los de seguridad abren la puerta del boliche y es ahí donde la gente de afuera comienza a revolear piedras, cascotes y botellas y es ahí donde le pega un escombro en la cara a mi hermana. La puerta se abre por la pelea que se viralizó entre unos chicos que estaban afuera con los de seguridad. Ellos fueron los que tiraron la piedra y son muchos testigos los que dicen eso. Abrieron la puerta principal y fue ahí donde comenzaron a volar todos estos objetos desde la puerta de entrada hasta adentro del local”.
En este sentido, indicó que “una vez que ella es impactada por el escombro, ella cae desmayada al suelo; estaba con su novio y su grupo de amigos y cuando ven esa escena lo primero que hacen es ir a asistirla y cuando ve que está toda llena de sangre, piden auxilio y ahí se acerca la gente de seguridad y cuando la levantan y ven que ella tiene toda la cara ensangrentada, le piden al novio una campera y hacen presión con la campera sobre la cara. Quien llamó a la ambulancia fue una amiga de mi hermana, los encargados del local no hicieron absolutamente nada. Ellos estaban apuradísimos en sacar afuera a mi hermana y ni siquiera la tendrían que haber movido del lugar. Se tendría que haber quedado ahí hasta que llegara el personal de salud para asistirla. Cuando la sacan afuera, el personal de seguridad se retiró y mi hermana se quedó con su novio y amigas. Cuando llegó la ambulancia, se van al Hospital de Río Grande. A mi hermana la dejaron tirada afuera como un perro”.
Según precisó Belén, “gracias a dios mi hermana está viva, pero lamentablemente va a tener secuelas. Nos trasladaron a Ushuaia porque el diagnóstico que le dieron es una múltiple fractura maxilofacial con hundimiento y fractura de nariz, y le afectó parte de la visión del ojo derecho y estamos a la espera. Según la cirujana en 10 días bajaría el hematoma para poder intervenirla. La van a operar para colocarle tres placas de titanio. Con nuestra familia no se comunicó nadie del boliche y evidentemente no tienen la intención de colaborar. Cero empatía con mi hermana y mi familia”.
Consultada sobre el accionar policial, advirtió que “cuando a nosotros el novio de mi hermana nos avisa, nos acercamos y había personal policial en el lugar y nosotros le preguntamos si ellos estuvieron ahí afuera y nos dijeron que no. entre toda la conversación, de parte del oficial aparece con un oficio preguntando si mi hermana iba a realizar la denuncia y él nos dijo que no era necesario hacer ninguna denuncia porque tenía dos años para hacerla, pero necesitaba que nosotros firmemos ese oficio. Mientras aguardábamos uno de los resultados de la tomografía, cuando vino la doctora y nos comenta el diagnóstico que tiene, nos acercamos al oficial y le dijimos que íbamos a realizar la denuncia. Leyendo el oficio y por lo que logré entender, decía prácticamente que nosotros no íbamos a realizar ninguna acción legal contra el boliche. Ahí le pedimos que por favor se acerque para hacer la denuncia y ellos insistían en que la denuncia debía hacer la denuncia personalmente. Después de tanto insistir, se acercó un patrullero y llevó a mi cuñado solamente porque no quería que nosotros no estemos presentes y querían psicopatear a mi cuñado para decirles que ellos estaban afuera del local cuando pasó lo del piedrazo cuando eso no fue así. De parte de la comisaría primera nos trataron mal y los testigos que fueron a la mitad le tomaron declaración y a la otra mitad no. Ellos querían dejar de lado el accionar del boliche y del personal de seguridad”.
Finalmente, aseguró que “no vamos a dejar que esto quede impune porque hoy le tocó a mi hermana, pero le puede tocar a cualquier”.
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