En una segunda reunión entre vecinos, representantes del gobierno y la municipalidad, se discutió el plan de trabajos sobre el puente de Río Grande y la necesidad urgente de abrir la Ruta 7 durante el periodo de reparación. Los vecinos, que atraviesan diariamente el puente, expresaron su preocupación por el tráfico constante y los embotellamientos que empeoran en horas pico y ante cualquier emergencia.

El reclamo central de los vecinos es que la Ruta 7 se mantenga abierta mientras se realizan las obras sobre el puente, lo que ayudaría a descongestionar la zona y permitir una circulación más fluida del tránsito, especialmente del tránsito pesado que actualmente atraviesa el puente. Durante la reunión, las autoridades informaron que los trabajos comenzarán en noviembre y se espera que se extiendan hasta mayo. Sin embargo, los vecinos insistieron en la importancia de coordinar los trabajos para que la ruta esté habilitada en ese periodo.

Uno de los puntos de mayor inquietud es la falta de claridad sobre los plazos y las obras complementarias, como la expropiación de terrenos y la pavimentación de la ruta, que no se han concretado a pesar de los anuncios anteriores. Además, los vecinos destacaron los problemas recurrentes de baches en el puente y los frecuentes accidentes, lo que agrava la situación.

Por último, los vecinos sugirieron la necesidad de reuniones conjuntas con Vialidad y el gobierno para garantizar que los trabajos en el puente y la apertura de la ruta se realicen de forma coordinada y eficiente, evitando mayores complicaciones para la comunidad de Río Grande.