El Presidente de la Cámara Hotelera y Gastronómica de Ushuaia, José Luis Recchia, hizo un balance de la actividad turística en temporada de verano, correspondiente al cierre del mes de enero. Por su parte, mencionó las consecuencias que dejó el párate de la actividad en materia de mantenimiento general de los establecimientos, sin dejar de lado la incertidumbre que acecha al sector ante la llegada de una posible ola de contagios.

Recchia en declaraciones a Minuto Fueguino comentó como se está trabajando en temporada de verano en la provincia, “El impacto que ha tenido en nuestro destino la ocupación, con el programa Pre Viaje 2, puntualmente en el mes de enero, después de lo que hemos padecido en los últimos meses en pandemia, hemos notado un incremento importante, con una ocupación en Ushuaia entre el 90% y 95%, depende de la categoría”.

En el caso de Río Grande, sostuvo: “el tema de la ocupación se complica un poco más porque por ahí no hay tanto personal corporativo que compense la modalidad o protocolos de la frontera, que había que volverse o quedarse un día más en Rio Grande, esto ha ayudado un poco más a la ocupación, pero por supuesto que no es tan alta la ocupación como en Ushuaia en esta época del año”.

En lo que respecta al aforo de estos espacios y los protocolos, expresó que, “se complica fundamentalmente en la gastronomía, Río Grande se ha reforzado más en este mes con el tema de los contagiados o aislados de cruceristas, que ya no había lugar en Ushuaia y fueron derivados algunos. En gastronomía prácticamente no digo que el aforo es normal, pero digamos que está mucho más permitido de lo que era algunos meses atrás”.

En otra línea, el referente de la cámara hizo un análisis de las consecuencias en la actividad tras casi dos años del párate en la llegada del turismo, “Son procesos que cuando dejas de reinvertir o hacer obras, fundamentalmente en establecimientos hoteleros, cuesta un montón recuperarse de esa falta de inversión, el tiempo pasa para los establecimientos, lo que no haces en el momento, hablamos de pintura, refacciones, mantenimiento en general eso va en deterioro de la calidad del servicio”.

“Hoy recién podemos decir que empezamos a tapar algunos agujeros de lo que nos ha quedado de 2 años a esta parte, en la proyección venimos -20 y estamos tratando de arrimar a que sea -10, pero esta es la proyección de poder estar en un ritmo como el que teníamos antes de la pandemia, en materia de mantenimiento y refacciones se necesita dos años más para estar al día como mínimo”, aseveró.

A pesar de no haber tenido turismo extranjero este año, la ocupación de camas con turismo nacional fue notoria en Ushuaia, “con el poder adquisitivo que tienen muchos turistas nacionales en otros momentos viajaban al exterior, hoy por el cambio del dólar no lo hacen y miran a Ushuaia como un buen destino, teniendo en cuenta además que con el Pre Viaje les significa el 50% del costo. Significa que, hasta semana santa aproximadamente, por supuesto que no con los porcentajes de ocupación del mes de enero, pero hay una proyección de ocupación relativa entre el 60% y 70%. Después, esperaremos al invierno y ojalá puedan entrar los equipos olímpicos".

Sobre esas expectativas, Recchia no dejó de lado la incertidumbre que implica la llegada de una ola de contagios, “Con Rio Grande y Tolhuin, esperemos que también se normalice las tareas de las distintas empresas, con el turismo corporativo como de alguna manera se venía dando. Más allá de lo que podemos recuperar o no, de la manera en la que podemos salir, está la incertidumbre hacia adelante porque se ha demostrado que se puede cerrar todo por contagios. Hemos tenido esta ola después de las fiestas, que por ahí no ha sido tan peligrosa para la salud como la han sido las anteriores, pero si la llegada del aislamiento que de cierta manera afecta de manera importante el desarrollo de las tareas, afectando el desarrollo normal de esta temporada también”, cerró.