USHUAIA. – Marina Perez es una de las tres docentes de la Escuela Especial Kayú Chénén de Ushuaia que se encuentra trabajando, junto a un grupo de nueve alumnos de entre 13 y 17 años, en el proyecto denominado “Cannabis-K” con el objetivo de visibilizar y desestigmatizar el uso medicinal del cannabis. Flavia Sosa y Graciela Pandolfo, completan el equipo de docentes.
En diálogo con Radio Nacional Ushuaia, la docente Marina Perez comentó que “la idea es desestigmatizar el uso de la planta como uso recreativo. Este proyecto comenzó a principio de abril cuando comenzamos a preparar en el Grupo 13 del trayecto formativo integral de la escuela especial. Es un tema en auge y los estudiantes ya venían realizando el año pasado una metodología de estudio más o menos parecida y algo que es de su agrado. Nos pareció trabajar el cannabis porque la pregunta principal fue: ¿por qué hablamos de cannabis medicinal en la escuela especial? Y la realidad es que hay muchos estudiantes de la escuela especial que utilizan el cannabis como uso medicinal para los dolores crónicos y diferentes patologías”.
En este sentido, indicó que “a partir de esta investigación descubrimos todas las propiedades que tiene el cannabis. Tenemos algunos estudiantes en el grupo que no tienen comunicación oral y manejan la lengua de señas y nos pareció bastante apropiado trabajar con Google Lens y nosotros presentamos la hoja de la planta y ellos le sacaron una foto y lo lleva a la información a través de la imagen o con videos. A partir de ahí comenzamos con el trabajo para ver de qué se trata y cuál es su uso. Hasta ahora investigamos bastante sobre el uso y abuso del cannabis. Trabajamos sobre las leyes y las distintas especies de la planta. La semana pasada realizamos una entrevista a Mamá Cultiva que tiene dos estudiantes acá en la escuela y nos contó lo favorable que es para ella y su familia utilizar el aceite medicinal”.
Consultada sobre por qué decidieron ese nombre para el proyecto, reveló que “estábamos pensando en un nombre hasta que salió Cannabis –K por Kayú y quedó así. Nosotros estamos trabajando con raíces de fuego que es una asociación que nos acompaña dándonos talleres y explicándonos las propiedades y cuidados de la planta. A futuro tenemos pensado realizar nuestro propio aceite ya que dos de nuestros estudiantes consumen el aceite y a futuro trabajar un proyecto para que la escuela especial pueda tener el permiso de REPROCANN, tener nuestro propio cultivo y realizar el propio aceite para todos los estudiantes de la escuela; es un proyecto a futuro, pero lo importante del proyecto de ahora es explicar el uso y propiedades de la planta para desestigmatizar el uso de cannabis medicinal. Los chicos ya aprendieron que no se dice marihuana sino cannabis sativa como indica su nombre científico”.
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