En febrero de 2018, un grupo de investigadores del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET), la principal institución científica argentina, emprendió un viaje de investigación a la Antártida para seguir avanzando en su misión de promocionar y ejecutar descubrimientos, actividades científicas y tecnológicas.
Sin embargo, lo que encontraron los dejó perplejos, ya que no esperaban realizar semejante descubrimiento. Fue el investigador José O’Gorman el que literalmente tropezó con un bulto semienterrado que, a medida que comenzó a analizarlo, se dio cuenta que pertenecía a un raro animal.
El descubrimiento realizado en la Antártida que sorprendió a los científicos
Después de los estudios correspondientes a este descubrimiento, finalmente se reveló que lo encontrado se trataba de una de las más de ochenta vértebras de la columna del elasmosáurido, un animal marino que convivió en la última etapa de los dinosaurios.
El elasmosáurido fue un animal que vivió durante el período mezoico, que se extendió entre los 66 y 250 millones de años atrás, y se cree que se extinguió junto con las mencionadas e históricas criaturas.
En otras palabras, los cientificos estaban en la Antártida ante un descubrimiento de más de 67 millones de años. Este animal fue inmediatamente trasladado a Buenos Aires, y asombró a los especialistas por su estado de conservación.
En sus características, este animal era un depredador activo, consumidor de peces y otros animales que nadaban frecuentemente. Los investigadores han señalado que el método de alimentación de este descubrimiento era similar al de una ballena.
Tal fue el impacto de este descubrimiento en la Antártida, que fue publicado por la revista Journal of Systematic Palaeontology, una de las más prestigiosas en este sentido.
Se reportaron más descubrimientos de elasmosáuridos alrededor del mundo
Más allá de este descubrimiento, un dato no menor es que se han reportado más hallazgos de este histórico animal alrededor del mundo.
Además de la Antártida, el elasmosáurido también ha sido un gran descubrimiento en países como Chile, Nueva Zelanda, y la Antártida Occidental.
Además de la sorpresa, este descubrimiento volvió a posicionar en el centro de la escena al período de extinción de los dinosaurios, la cual se cree que fue repentina y provocada por un gran asteroide.
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