Netflix estrenará a su público “El fotógrafo y el cartero: el crimen de Cabezas", un documental argentino que narra la historia detrás del emblemático caso de José Luis Cabezas que dejó una huella imborrable en la historia de fotoperiodismo y la libertad de expresión. Primero será exhibido en el Buenos Aires Festival Internacional de Cine Independiente (BAFICI), y luego pasará a la plataforma el 19 de mayo.

El proyecto es dirigido por Alejandro Hartmann junto con la productora ejecutiva Vanessa Ragone, quienes también fueron los responsables de “Carmel: ¿Quién mató a María Marta?” sobre el crimen de Belsunce que se estrenó en el catálogo a fines de 2020 y fue todo un éxito dentro del servicio de streaming.

Ahora llevaron a cabo un trabajo de investigación y reconstrucción del crimen de José Luis Cabezas, con especial foco en el entramado mafioso que ataba a homicidas con el poder político y económico del país. El 21, 22 y 24 de abril, las salas seleccionadas por el Bafici estrenarán al público el documental producido por Netflix. Un mes más tarde, el 19 de mayo, Netflix lo estrenará para el resto del público.

Por medio de material de archivo y testimonios exclusivos, el filme propone un relato sobre las circunstancias que rodearon el crimen del fotógrafo, asesinado en enero 1997 luego de que menos de un año antes, en marzo de 1996, consiguiera para la revista Noticias las primeras fotos públicas del empresario Alfredo Yabrán, acusado de tener una profunda vinculación con la corrupción política durante los gobiernos de Carlos Menem.

Quién fue José Luis Cabezas

Nacido en la localidad de Wilde el 28 de noviembre de 1961, José Luis Cabezas se desenvolvió como reportero gráfico y fotógrafo en la revista Noticias, medio de comunicación en el que ejerció hasta el día de su muerte.

Logró destacarse en el rubro luego de fotografiar al capellán José Fernández en la réplica del cementerio Darwin de la Isla Soledad, en la localidad de Pilar, como homenaje a los veteranos y caídos de la Guerra de las Islas Malvinas.

Durante marzo de 1996 la revista publicó las primeras fotos que daban a conocer la identidad de Alfredo Yabran mientras paseaba con su esposa a orillas de la playa. El escándalo del hecho llevó a que, diez meses más tarde, en el verano de 1997, Cabezas fuera encontrado sin vida dentro del Ford Fiesta que alquilaba desde el medio de comunicación para cubrir la temporada alta de los políticos de turno en la ciudad de Pinamar.

Su cuerpo calcinado fue hallado cerca del partido de General Madariaga, en el paraje de Los Manantiales, con las manos esposadas a la espalda y con dos heridas de bala en la cabeza.

Su muerte conmocionó a la opinión pública y desató consecuencias en diferentes esferas de la política, como el aumento del desprestigio del gobierno de Menem y la derrota del Partido Justicialista en las elecciones legislativas de 1997 y las presidenciales de 1999.

En 2000 se llevó a cabo el juicio oral y público en el que fueron condenados ocho hombres, entre ellos Gregorio Ríos, jefe de seguridad de Yabrán, y tres policías. Sin embargo, Yabrán se suicidó en mayo de 1998 con un pedido de captura pendiente sobre él y nunca llegó a vivir el proceso judicial.