Según el informe del forense, descartó de plano que Jaime fuera pirómano, aseguró que existen otros hechos delictivos cometidos a lo largo de su vida, pero no con estas características.

Acerca de la ingesta de alcohol y fármacos, vinculados con la posible pérdida de memoria temporal, Pérez Artaso explicó que para que una persona llegue a un nivel de inconciencia por ingesta de alcohol, la cantidad de alcohol en sangre debe superar los 2.5 gramos, mientras que Jaime solo presentaba 1.07 gramos por litro. De este modo, agregó. “Me parece difícil el estado de inconciencia”.

Finalmente, el profesional de la salud mental dijo: “No presenta alteraciones de las facultades mentales. No es pirómano. No hay elementos para decir que no comprende la criminalidad de sus actos”.

¿Qué dijo el psiquiatra forense respecto de la conducta de Jaime? 

Previo a conocerse se llevó adelante la etapa de declaraciones testimoniales, entre las cuales se encontraba el testimonio del psiquiatra forense, el Doctor Jorge Pérez Artaso, quien fue consultado acerca de la conducta de Jaime. 

El psiquiatra atendió a Jaime a 10 días de su detención –ocurrida el 16 de marzo por la madrugada-, según refirió el profesional, el acusado estaba seriamente angustiado por el grave estado de salud de madre, que, pocos días después, falleció mientras él permanecía alojado en la Unidad de Detención de Río Grande.

Acerca del hecho concreto vinculado al siniestro en la escuela, y el hecho de “no recordar nada”, Pérez Artaso explicó que, “Existen las amnesias, una las que son mas posibles, son aquellas en las cuales recuerda en flashes o más bien de modo fragmentado” Otra clase de amnesia es aquella “en telón, la cual es una especia de manto, es decir, se acuerda el antes, el después pero no el durante” de un episodio concreto. 

Sin embargo, el psiquiatra fue cauto, y explicó que el paciente poseía “un juicio conservado, tiene impulsividad e indicios de organicidad. No había nada demencia, aunque sí indicios de consumo de bebidas alcohólicas y otras sustancias”

Asimismo, el forense indicó que Jaime poseía una personalidad antisocial que se inicia en la niñez y perdura hasta la adultez, con signos de hostilidad y agresividad.