El Juez Federal de Ushuaia, Federico Calvete, resolvió postergar las declaraciones indagatorias de los dos efectivos de Gendarmería acusados de haber actuado con negligencia en un operativo por drogas. Las indagatorias se postergaron porque la causa todavía no tiene un fiscal que se aboque al caso.

En el procedimiento realizado el pasado 20 de julio en una vivienda situada en la calle Goleta Florencia y Ricardo Güiraldes de la capital fueguina, fue detenido un hombre, (entre otras personas), quien según se investiga, para evadir su responsabilidad ingirió unos 10 gramos de cocaína que tenía entre sus pertenencias, falleciendo días después en el Hospital de Ushuaia.

La acusación inicial contra los gendarmes fue realizada por el abogado de Ushuaia Juan Manuel Troitiño, quien intervino como fiscal subrogante y los imputó a los dos gendarmes por “comportamiento negligente” aunque “no calificó los hechos dentro de una figura delictiva determinada”,

El día del operativo, la Gendarmería actuó a las órdenes del propio juez Calvete como consecuencia de la “entrega vigilada” de cocaína y marihuana proveniente de Misiones ingresado a la provincia a través de una “mula”.

Calvete había llamado a declarar al oficial de Gendarmería José Burgos y a un médico de la institución, Hernán Vargas, que intervinieron en el operativo donde fue detenido Amilcar Mazzone, de 39 años, quien según se investiga, para evadir su responsabilidad ingirió unos 10 gramos de cocaína que tenía entre sus pertenencias.

Mazzone se descompensó al poco tiempo y fue trasladado al Hospital Regional Ushuaia donde lograron reanimarlo de “varios paros cardíacos”, hasta que finalmente sufrió “muerte cerebral” y falleció el miércoles 24 de julio.

El motivo por el que Calvete pospuso las indagatorias es la ausencia de un fiscal que se aboque a la causa, indicaron las fuentes consultadas.

Sin embargo, tras la finalización de la subrogancia, el caso volvió al titular de la Fiscalía Federal de la ciudad, Juan Soria, que se excusó de intervenir debido a la cercanía laboral que posee con los gendarmes, quienes por lo general participan de la mayoría de los procedimientos federales del distrito.

A raíz de ello, el expediente debe recorrer nuevamente la nómina de fiscales subrogantes para ver cuál queda a cargo de las actuaciones. Una posibilidad es que regrese de nuevo al propio Troitiño.

Los investigadores deben evaluar si los gendarmes advirtieron o sospecharon que Mazzone había ingerido la droga. Y si una vez confirmado ese episodio, demoraron el traslado al hospital.