Los delegados de la empresa Textil Río Grande S.A. remitieron una nota al Ministerio de Trabajo de la Provincia, a fines de justificar la medida de mantener la planta cerrada al no poder hacer frente al pago de los salarios al personal suspendido y, por lo tanto, no acceder a un nuevo acuerdo con el gremio para mantener los puestos de trabajo.

En ese marco, los directivos de la textil indicaron que “es de público conocimiento la gravísima situación económica y financiera que existe en la actividad -lo que ha sido reconocido por la entidad gremial en medios de prensa- claramente reflejado por estar desde el mes de enero y hasta la fecha la fábrica cerrada y sin actividad productiva alguna, situación que no resulta imputable a Textil Río Grande SA”.

A su vez, indican que la documentación solicitada por la autoridad laboral a la empresa se estaría presentando una vez que se otorgue “una prórroga de 10 días hábiles para dar cumplimiento al requerimiento de documentación, dado que la planta se encuentra cerrada y sin actividad alguna”.

Cabe señalar que, la empresa negó rotundamente haber contactado a los trabajadores para ofrecerles sumas inferiores a las que les correspondiera para desvincularse, por lo cual, los representantes de los trabajadores indicaron que “más allá de lo expuesto, el retiro voluntario es un acuerdo privado entre las partes”.

La reciente nota fue incorporada en el expediente iniciado en el Ministerio de Trabajo en virtud a la denuncia de los trabajadores al no poder acceder a sus puestos de trabajo dado a que, la planta fabril se encuentra cerrada, luego de haberse cumplido la última prorroga de la suspensión en común acuerdo la cual solo era de sesenta días.

Es importante destacar que, en nueva audiencia formalizada en la cartera laboral, la empresa presentó un escrito en el que ratificó la decisión de no abrir las puertas de la planta y ofrecer un retiro voluntario pagado en cuotas.

Ante la decisión de los dueños la firma, la Asociación Obrera Textil confirmó que siguen reclamando el pago de “los salarios adeudados hasta la fecha. Así que, sumado a eso, se le pidió al Ministerio de Trabajo que haga una inspección sobre los recibos de sueldo y todos los movimientos por salarios que tiene la firma”.

Hoy está pactada una nueva audiencia en el Ministerio de Trabajo, aunque los trabajadores no abrigan muchas esperanzas de que la situación pueda tener un giro a favor a de los 60 trabajadores que continúan en lucha.