Marcelo es un vecino de la ciudad de Río Grande que, debido a un accidente laboral que tuvo en el 2018, hoy se encuentra limitado para poder movilizarse por cuenta propia y necesita a la brevedad una silla de ruedas, dado a que, por el momento, utiliza muletas para trasladarse ya que, la obra social PROFE, no le brinda respuestas a sus solicitudes.

En esa línea, Marcelo relató cuando se accidentó y dijo “en el 2018 me caí en el laburo, un accidente laboral y me quebré una rodilla, un meñisco y al ser excedido de peso, en vez de mejorar fue empeorando. Me hicieron una operación en una rodilla, otra en otra y eso implicó ahora una artrosis de rodilla y cadera”.

Además, indicó que debido a los dolores que le provocaba su afección “tomaba calmantes, ya se hace una costumbre y hay días que no hace el efecto. Esto me provocó una bacteria intestinal, un sangrado interno, estuve internado una semana”, lamentó el vecino.

Agregando que “estoy en tratamiento en bypass gástrico, también tomo medicamento y calmante y eso implica más demoras, más estudios y es hasta que baje el peso para que me puedan evaluar de vuelta la condición de mi cadera y mi rodilla”.

En cuanto a las respuestas de la Obra Social PROFE, resaltó que “ya he hecho el reclamo dos o tres veces, he hecho un escrito, he ido donde me mandaron, he ido a lo que me pidieron, diez mil papeleos, lo he hecho todo, pero hasta el momento nada”.

Dado a que actualmente utiliza muletas para poder movilizarse, Marcelo recalcó que “me complica tanto para salir, para volver y hacer las cosas básicas del día, hacer trámites, ir al médico, totalmente para todo, no se lo desea a nadie, totalmente a nadie”, dijo muy angustiado.

Debido a que Marcelo precisa de forma urgente una silla de rueda, detalló que anteriormente “un vecino amigo, cayó como en cualquier día y le conté. Él subió un día que necesitaba una silla de ruedas, un vecino le prestó una, pero no era del tamaño y lo que necesitaba yo, así que la devolvimos”.

Por lo cual, se refirió a los costos que conlleva alquilar o comprar una silla de ruedas “esto es lo más gracioso, $7.000 cuesta la semana y $540.000 comprar una nueva. Yo no pido plata, no pido ayuda económica, soy una persona que mantiene mi perfil bajo y trato de molestar lo menos posible, pero necesito la silla de ruedas para hacer mis cosas diarias”, concluyó Marcelo.

Aquellos que deseen contactarse con Marcelo pueden hacerlo al +54 9 2964 50-7020