Corresponde al sistema de bombas que impulsará el agua para regar la zona, y de este modo evitar la suspensión de polvo en épocas de viento, que afecta a familias que viven en inmediaciones a la Laguna.

Tras regularizar el pago de certificados que se encontraban impagos desde el año pasado, el Ministerio de Obras y Servicios Públicos de la Provincia reactivó a principios de marzo, la última etapa de la obra de Laguna Seca.

A la espera de insumos para continuar con la ejecución de los trabajos, esta semana arribaron a la provincia las bombas que permitirán impulsar el agua desde la toma ubicada en el Río Grande, y que será trasladada mediante las cañerías, que ya fueron instaladas, hasta la zona de la Laguna.

Cabe destacar que los trabajos están enmarcados dentro de las obras prioritarias definidas por el Gobierno de la provincia, en el marco de la pandemia del COVID-19; y donde el personal afectado a los mismos se encuentra trabajando con la protección y las medidas correspondientes.